27 Mar
RESEÑA: La mano izquierda de la oscuridad, de Ursula K. Le Guin

Tal vez la escritora de ciencia ficción más conocida. Creadora de Terramar, exponente de la prospectiva feminista sin que deseara que se le adjudique tal palabra, sus historias están repletas de problemáticas sociales que trascienden el ingenio de la trama y nos llevan a darle una nueva mirada a nuestra realidad. Ese es el caso del presente libro, un clásico del género y de la literatura en general.

Publicado en 1969, La mano izquierda de la oscuridad es una novela perteneciente al ciclo Ekumen, una serie de novelas (8 en total) que comparten el mismo universo en donde el ser humano habita diversos planetas. Pero no te preocupes. Se puede leer de modo independiente al resto de libros ya que no hay una clara continuación secuencial; la historia es autoconclusiva. Aun así la lectura se enriquece conociendo el resto de historias, pues hay referencias sobre el pasado de las razas y el trasfondo histórico de las comunidades espaciales.

Ursula K. Le Guin (imagen extraída de elpais.com)

Trama

Genly Ai es un enviado del planeta Terra cuya misión es establecer relaciones diplomáticas de intercambio material con Gueden, planeta también denominado Invierno por sus bajas temperaturas ―él pertenece a la unión galáctica llamada Ekumen. Para ello, llega al país Karhide para tener una reunión con el rey y lograr convencerlo de efectuar la alianza, con la esperanza de que el resto de países haga lo mismo cual efecto dominó. Pero no le resultará sencillo. A pesar de ser tratado con cierta amabilidad, será visto por algunos como un otro monstruoso, un ser extraño a la raza nativa del lugar no solo por la incredulidad de muchas personas en cuanto a su historia espacial, sino por naturaleza biológica: los habitantes de Gueden son hermafroditas; Genly no.

La historia se puede resumir así en los intentos de un diplomático por obtener un intercambio cultural y tecnológico, pero a nivel planetario. Sin embargo, el contenido temático es complejo. Se nos presenta un escenario social en donde la separación binaria entre varón/mujer no existe, pues un solo ser es ambos por fases, hombre durante cierto tiempo, fémina en otro. El periodo de procreación se ubica durante algunos días a fines de un mes “guediano” (kémmer), mientras que en el resto del tiempo se olvidan las tensiones sexuales/eróticas (sommer). La unificación de los géneros elimina las disputas de superioridad entre ambos, reduce la violencia. Aun así, las conquistas por el poder no desaparecen, pero no interviene algún tipo de virilidad ya que inclusive los reyes pueden embarazarse.

El potencial crítico del cambio a nuestra concepción dual del sexo se muestra representado en el trato hacia Genly. Él es una especie de monstruo porque se mantiene hombre durante toda su vida a comparación de los “guedianos”. El miedo y reserva hacia el otro que tanto se observa en nuestra sociedad se sugiere aquí desde otra normalidad, una en el cual nosotros como lectores seríamos otros monstruos más, mientras que los hermafroditas serían los sujetos cotidianos. Esta es una de las principales astucias de Le Guin.

Sin embargo, el texto no es blanco ni negro en sentido moral ni se limita al tema del género. No se propone una sociedad utópica unisexual, sino que se mantienen algunos problemas sociales bajo otra lógica comunal. Ello indica que no hay héroes ni villanos, y que la maldad y la bondad forman parte de un mismo ente. Bajo cualquier régimen político y aun con perspectivas de mundo distintas según la conformación biológica de los seres vivos, los conflictos seguirían existiendo. Y sucede por el deseo al poder, como ocurre en la novela. ¿Que hay más temas? Mucho más de los que puedo mencionar aquí (diplomacia, confianza, amistad), e inclusive otros que se pueden derivar de la historia como el anarquismo. Eso sí, en todos los concernientes al ámbito político el libro no se decanta por una única opción, sino que incita al lector a la reflexión por esa situación de incompletitud, de un escepticismo ante el apoyo ferviente de cualquier régimen.

Para tu lectura te será útil recordar algunos lugares como:

- Gueden/ Invierno: planeta a donde llega Genly. Sus habitantes lo denominan Gueden, mientras que los de otros planetas lo llaman Invierno. Se encuentra alejado del resto de cuerpos celestes con vida. En general, desconocen la existencia de vida en el espacio.

- Carhide: Primer país que visita Genly. Tiene un régimen monárquico y su gentilicio es karhídero.

- Ernherang: Capital de Carhide.

- Orgoreyn: Segundo país que visita Genly. Tiene un régimen asambleísta y su gentilicio es orgota.

- Ekumen: federación de planetas que da nombre al ciclo literario. En ellos se desarrollan la trama de las novelas.

Paisaje de Gueden (imagen extraída de okdiario.com)

Personajes

Si a nivel de trama la novela es relativamente sencilla, en los personajes radica su mayor riqueza. Partimos de la situación ya mencionada del hermafroditismo en Gueden que hace a cada persona interesante, pues sea cual sea su personalidad podemos tener en cuenta lo siguiente: ¿puedo imaginarla en mi mente del mismo modo, pero en una versión de género distinta? Es por lo menos un buen ejercicio de imaginación. Ahora, en cuanto a protagonistas vale rescatar únicamente a dos, los cuales mueven la trama hacia su final y representan, al fin y al cabo, la novedad “cienciaficcionera” de la historia, pero de modo personal, íntimo por la relación entre ambos.

- Genly Ai: alguien como nosotros. Es el enviado de Ekumen para proponer a los gobernantes de Gueden a que se unan a su federación, y como tal procura cumplir su papel de diplomático y mediador. Mantiene una actitud calmada y racional frente a los políticos de Carhide, pero a la vez desconfía de algunos, especialmente de Estraven. Será quien a lo largo de la historia cambie más de actitud, de un estado inicial de extrañamiento frente al nuevo planeta y sus habitantes al de un sentimiento de familiaridad. A pesar de su ecuanimidad, no dejará de impresionarse frente al hermafroditismo y poco a poco, también, a la personalidad de su compañero Estraven.

- Derem Har rem ir Estraven: o simplemente Estraven. Nativo de Gueden, es inicialmente la mano derecha del rey de Karhide, hasta que es sentenciado al destierro por una supuesta confabulación contra la soberanía de su majestad. Racional, astuto e intuitivo, no parece mostrar sus intenciones de manera tan fácil, por lo que actúa mediante el poder de la persuasión para ayudar a Genly en su misión. Frente a otros personajes, es el más radical en su pensamiento por su descreimiento en el patriotismo, razón (en parte) que lo lleva a ayudar al “Enviado”, aunque también guarda simpatía hacia él. Para una muestra, un fragmento de sus palabras:

Conozco gente, conozco ciudades, granjas, montañas y ríos y piedras, conozco cómo se pone el sol en otoño del lado de un cierto campo arado en las colinas; pero ¿qué sentido tiene encerrar todo en una frontera, darle un nombre y dejar de amarlo donde el nombre cambia? ¿Qué es el amor al propio país? ¿El odio a lo que no es el propio país? Nada bueno.

Estraven (izquierda) y Genly (derecha)

Forma

Hay dos narradores en primera persona que nos permite conocer la manera de pensar de los protagonistas. Cada uno corresponde a Genly y a Estraven y enriquece a la novela, pues se nos ofrece así dos perspectivas: la de alguien frente a una sociedad distinta y que aun así es considerado como un extraño, y la de otro que en dicha sociedad es tratado como un paria.

Por otra parte, abundan las descripciones topográficas. Este punto es entendible al presentarnos un lugar parcialmente distinto a nuestra realidad, con países y ciudades propios. No obstante, en la segunda mitad de la historia y durante un extenso viaje se vuelve en un recurso por momentos cansino, ya que la trama se ralentiza para dar pase si bien a ideas interesantes entre los protagonistas, también a un segmento lento en comparación con la primera mitad. En ese sentido, puedes aburrirte si no te agradan las menciones detalladas de los lugares de un viaje.


Durante una época de movimientos contraculturales y pacifistas, como el hippie, las ideas de La mano izquierda de la oscuridad mantuvieron un nicho ideológico propicio. Sin embargo, en nuestro tiempo no dejan de ser provocadores sus planteamientos en cuanto al género, la sexualidad y, sobre todo, al miedo hacia el otro distinto. La novela de Le Guin humaniza todos estos puntos y devela, al final, la condición absurda de las luchas entre facciones de la normalidad y la otredad, porque

La luz es la mano izquierda de la oscuridad      

y la oscuridad es la mano derecha de la luz.

Los dos son una, vida y muerte, juntas

como amantes en kémmer,

como manos unidas,

como el término y el camino.

Detalles técnicos

Género: Ciencia ficción

Editorial: Minotauro

Año de publicación: 2018 (edición presente)

Año original de publicación: 1969

N° de páginas: 302

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