RESEÑA: El fin de la infancia, de Arthur C. Clarke
El futuro, casi siempre incierto, es la temática clásica de la ciencia ficción. Sin embargo, a veces la incertidumbre no solo se traslada al lector por los elementos prospectivos y posibles de la ficción, sino dentro del propio universo del texto a los personajes que se encuentran enfrentados al devenir de la raza humana. Ese es el caso de la presente novela de Clarke.
Publicada en 1953, Arthur Charles nos propone una nueva historia de invasiones extraterrestres si la comparamos con La guerra de los mundos, de H. G. Wells. En lugar de trípodes disparando a cualquier persona que encuentre a su paso, una serie de naves llegan del cielo y alteran la política internacional. Para siempre. Las guerras cesaran, los crímenes serán casi inexistentes, el ocio y la satisfacción de las necesidades básicas serán del gozo de cualquier persona, pero ¿cómo la humanidad llegará a ello? ¿Y a cambio de qué? Vamos por partes y sin mayores spoilers.
El libro se divide en un prólogo y tres partes. Salvo por los alienígenas, la trama no mantiene un único protagonista humano, sino que presenta distintas perspectivas; además, hay saltos en el tiempo. Es, pues, la historia de la humanidad, y por ello es mejor dar una panorama de cada uno que en conjunto construyen nuestro devenir o evolución.
Arthur C. Clarke
Prólogo
Sitúa la trama aproximadamente en el año 1975 en medio de la Guerra Fría. Dos antiguos amigos, Reinhold y Schneider, se encuentran respectivamente al servicio de Estados Unidos y la Unión Soviética en la carrera espacial. Recordemos que esta situación fue real tras el lanzamiento del satélite Sputnik en 1957 por parte de los soviéticos y cuya respuesta estadounidense esperó hasta 1958 con la salida al espacio del Explorer I.
La llegada de las naves es entonces simbólica, ya que 1975 es considerado como el final de dicha competencia astronáutica y la novela da a entender la inutilidad de las peleas entre naciones. Y es a través de los ojos de Reinhold que el lector asiste al momento exacto en que, como menciona el texto, se crea el siguiente hecho: «La raza humana ya no estaba sola».
Primera parte
O «La tierra y los superseñores». En esta sección han transcurrido algunos años desde la llegada de los extraterrestres, también llamados como en el título. Karellen, su líder, mantiene un contacto casi directo con el secretario general de las Naciones Unidas, Rikki Stormgren, y escribo “casi” pues en las reuniones dentro de la nave el secretario no puede observar la apariencia física del superseñor. En una sala simple, una supuesta pantalla media entre ambos impidiendo la visibilidad del otro lado de Rikki.
Y no solo él no puede verlo. Toda la raza humana desconoce la figura de los superseñores y principalmente por ello, como se reflexiona en varios momentos, surgen hipótesis sobre el porqué del ocultamiento y la verdadera naturaleza de los extraterrestres. Todo ello, aunado al miedo y recelos de distintos grupos políticos llevaran a la creación de movimientos de resistencia y oposición al gobierno mundial instaurado. No obstante, los nuevos gobernantes del espacio otorgarán libertad para estas expresiones pues permiten que cada nación conserve a sus líderes. Es así que no solo ellos serán el foco de estas personas, sino el propio Storgren al ser la figura más cercana a Karellen.
Los capítulos se encargan de desarrollar este conflicto y, en perspectiva, de representar a la sociedad más inmediata a la nuestra, aquella que podría aceptar un nuevo régimen como el de la novela aunque con inevitables cuestionamientos. La situación es ambivalente en la nueva utopía, ya que mientras las personas con poder realizan distintas manifestaciones y ataques con el afán de contrarrestar el accionar de Karellen, el resto de civiles aceptan la paz que trae su gobierno. En cierta medida, es una alusión a los intereses dispares entre quienes ejercen la política y quienes son objetos de su aplicación, o el pueblo. En resumen, esta parte es el inicio de la “nueva evolución” de los humanos, como se verá más adelante.
Segunda parte
O «La Edad de Oro», cuando llegamos al siglo XXI. Han transcurrido ya los cincuenta años prometidos por Karellen desde su promesa a la raza humana. « ¡Ha llegado el día!». La nave central del superseñor se queda suspendida sobre Nueva York y las personas se amontonan, expectantes de la revelación que costó una generación: la apariencia física de los superseñores. Las puertas se abren, el silencio reina y finalmente el ser sale a la luz ante una mirada general que contendría más horror si hubiera sido de la sociedad durante la Guerra Fría. ¿Por qué? Por la carga cultural que trae consigo. Para quienes aún no leen la novela no les malograré la sorpresa; para quienes sí, comprenderán el tema que subyace junto al de la evolución.
En esta ocasión los nuevos personajes son la pareja Jean Morrel y George Greggson, su amigo Rupert Boyce y su pareja Maia, además del hermano de ella, Jan Rodricks. Todos ellos asisten a la fiesta de Rupert, quien tiene como excusa la presentación de su nueva esposa. Durante el evento la pareja Morrel se encuentra, para su sorpresa, con el superseñor Rashaverak, invitado del anfitrión de la fiesta. Por su parte, gracias a George conocemos al verdadero protagonista de esta parte, Jan, un hombre de piel oscura que mantiene aún un ímpetu romántico, aventurero, al no encontrarse contento con la situación mundial del nuevo ser humano. Y es que con él profundizamos en la propuesta de la utopía y sus consecuencias.
A cambio de la paz, la religión ha mermado su influencia, pero también la ciencia, ya que los superseñores representan los avances que los estudios científicos aún no ha logrado y que ya no necesitan alcanzar, teniendo ya los resultados. El ocio predomina y existe un adormecimiento de la curiosidad sobre el mundo y el universo. En esta situación la historia plantea una gran dualidad sobre la libertad y la tranquilidad social. Ambos presentan pros y contras y la elección por uno u otro podría mutilar al ideal opuesto. Desde este punto de vista, el texto se complejiza ya que no termina por decidir su postura (su narrador no interfiere mucho), otorgando una mayor libertad al desarrollo de las ideas a través de los personajes y su contexto. Todo ello dentro del flujo de un tiempo lineal, sin mayores flashbacks que se acompasan con la trama “escondida” de una evolución inevitable que está pronto a llegar.
Extraído de conspiraciones1040.blogspot.com
Tercera parte
O «La Última Generación». Nuevamente la pareja Jean y George adquieren protagonismo cuando deciden vivir en una isla especial, refugio de artistas e intelectuales que desean recuperar algunas costumbres de la vieja civilización, de aquella previa a la llegada de los superseñores. Es aquí en donde la ¿deprimente? verdad del porqué de la venida de Karellen y su raza se revela, marcando así el final de la Edad de Oro y dando sentido al título de esta parte. ¿Quiénes son la Última Generación? ¿Y por qué la novela alude al final de la infancia? Todo se aclara, todo culmina en un final no solo impactante para la pareja protagonista, sino para toda la especie humana.
En definitiva, aunque Clarke maneja una prosa sencilla sin mayores vuelos poéticos, la carga temática de la novela contiene su riqueza y es el causante de que éste sea un clásico de la ciencia ficción y de la literatura en general. Evolución, futuro de la humanidad, gobierno mundial, paz, libertad y vida extraterrestre son los temas más destacados, todos confluyentes en cada una de las tres partes y abordados de distintos modos, pues con el avance de las tramas particulares también se desarrolla la carrera de los seres humanos por su forma final, la cumbre de su desarrollo, y el modo particular en que cada sociedad reacciona. Si lo colocamos en escalas, la trama se asemeja a la historia de la humanidad que entre periodos histórico-culturales manejan una gama de valores y moralidad diferentes. En otras palabras, la ciencia ficción de El fin de la infancia no solo recae en el novum o novedad de la llegada de los extraterrestres y sus artilugios, sino en la elaboración de la próxima historia de la humanidad a modo de un historiador del futuro.
Detalles técnicos
Género: Ciencia ficción
Editorial: Minotauro
Año de publicación: (de la presente edición) 2018
N° de páginas: 226
