11 Oct
RESEÑA: Berserk, de Tim Lebbon

Desconocía la literatura de Lebbon hasta que lo encontré en la FIL de Lima, llamándome la atención el rótulo “Del ganador de los premios August Derleth, Bram Stoker y British Fantasy” más que la trama cuando me fijé en este título. Es que es cierto, Lebbon ganó en 2001 el Bram Stoker ―de los más prestigiosos en el terror― por su cuento “Reconstructing Amy” y es así que tuve algunas buenas expectativas con mi compra.

Y pues erré. Pero vamos paso por paso. Berserk fue publicada al español por la editorial La factoría de ideas que nos suele traer esos libros de fantasía, ciencia ficción y terror que otros no traducen. La trama nos sitúa en los Estados Unidos con la historia de un padre dolorido por la muerte de su hijo diez años atrás, aunque él sospecha que los militares con quienes convivía por ser un soldado le mintieron. Todo cambiará en su vida cuando decida investigar la tumba de su hijo dándose con la sorpresa de que yacen otros cadáveres mutilados y encadenados, especialmente el de una niña…

Tim Lebbon

Trama

Tom es un padre sumido en una secuencia de tragedias. Comenzó diez años antes del inicio de la trama principal, ya que su hijo fue soldado. Sin mayores explicaciones, falleció durante una misión y enterraron su ataúd sin que ellos permitieran verlo. ¿Me estarán mintiendo?, se preguntaba durante el tiempo de luto que, tras una década, se iba a cumplir cuando, sentado en un bar, oye que dos tipos conversan sobre lo sucedido aquel entonces. Y aunque él intenta abordarlos para tener mayor información, no consigue buenos resultados. Solo la frase suelta “Allí tenían monstruos” lo motivó a explorar la verdad detrás de la supuesta mentira.

Y poco más tiene la novela para ofrecernos. Tom descubre que en la fosa común no se encuentra su hijo, y sí otros cuerpos más y entre ellos el de una niña que puede comunicarse con él a través de telepatía, pues su cadáver ya es una momia. Ella le asegura que puede ayudarlo a encontrar a su hijo si la saca y la lleva hacia otro destino. Duda, claro, pero el tiempo se agota cuando uno de los hombres del bar se entera de sus acciones y va en su búsqueda para asesinarlo junto a la niña, ya que ella parece ser un peligro para la humanidad.

Después, el desarrollo de la trama sigue una secuencia similar a las pelis de acción, las malas pelis de acción en donde gran parte de la cinta se rellena con escenas de persecución, tiroteos, golpes y sangre. Seremos testigos de un 60% de contenido que pudo reducirse a 20% o un poco menos para explorar mejor las motivaciones de los personajes, no tanto el de Tom como si el de la niña-cadáver, Cole ―el perseguidor― y el trasfondo de la historia. Aunque el secreto de la criatura no es tan original, sino un refrito, al menos daba mayor juego que lo mostrado.

¿Y el paradero del hijo “muerto” de Tom? No desvelaré nada por ser spoiler, pero en verdad resulta decepcionante que la conclusión de la novela enfoque este punto cuando era la principal razón de la trama. No se le da la relevancia que debió tener. El problema al final resulta ser un mal manejo de los puntos de giros y poco trabajo en la proporcionalidad de los conflictos. El terror de la premisa se diluye por tal motivo.

La portada original de 2006

Personajes

Lebbon elaboró mejor el planteamiento de los protagonistas antes que la historia, según lo plasmado. Tom y su esposa son personajes en una situación interesante y triste, ya que intentan sobrellevar la muerte de su hijo a sus cincuenta años (Tom) con bromas cotidianas y un cariño aún presente. Sin embargo, mediante algunos gestos y momentos nos damos cuenta de que permanece la ausencia inclusive bajo cierta aura de culpa. Cada uno de los que aparecen a continuación tienen un objetivo, y tanto Tom como Cole sienten el deber de llevarlo a cabo.

- Tom: Steven es el nombre de su hijo, aquel por quien decide arriesgarse a confiar del cadáver de una niña telepática. Sin embargo también le es un lastre, ya que cuando descubre alguna posibilidad de que Steven se encuentre vivo su vida se transforma en un infierno. Su esposa pasa a segundo plano y arriesga su propia vida para hallarlo, aun cuando todo podría ser una mentira. De hecho, cierta tragedia y su posterior reacción me lleva a pensar que él es un tanto inverosímil por la manera en que regresa nuevamente a las carreteras. En una mejor historia pudo desenvolverse mejor.

- Cole: ex-militar que conoce la naturaleza de la niña. ¿Sospechan con este detalle el secreto de la trama? Es un sujeto obstinado, tanto como Tom, y en nombre de un deber que se autoimpone decide asesinar a la criatura aunque en el camino tenga que eliminar a inocentes. Sus reacciones son llamativas pues se plantea el dilema moral sobre si sus cometidos se justifican o si él mismo es un monstruo por matar civiles. De lejos, el personaje con mayor profundidad de la novela.

- Natasha: la niña monstruo. En un inicio se hallaba encadenada en la fosa común junto a más personas, pero convence a Tom para que la rescate. Al parecer sabe qué ocurrió realmente con Steven, pero durante gran parte del libro no proporciona mucha información al padre. Parece tener una doble personalidad, grosera y retadora con Cole, asustadiza y tierna con Tom. Se comunica telepáticamente con ambos con el fin de dar inicio a la persecución y así lograr que Tom la lleve a donde quiere, aunque luego se encariña de él. Personalmente me es un personaje un tanto indiferente, ya que parece más un recurso narrativo para movilizar la trama que una persona con motivaciones, emociones y objetivos propios.

Forma

Una razón por la cual no deben guiarse de las “reseñas” en las contraportadas: “En la obra de Lebbon se halla el realismo contemporáneo de Stephen King y el lirismo de Ray Bradbury”. Tal afirmación aparecía en mi ejemplar y, vamos, no es muy creíble cuando solo hay aplausos. Es cierto que leí la traducción al español, pero si el estilo es similar al original entonces Berserk no tiene casi nada de King y nada de Bradbury.

Es cierto que nuestros protagonistas son personas de clase media estadounidense y que su lenguaje es relativamente coloquial, pero no es una virtud, sino una característica. Por otra parte, en algunos pasajes aparecen figuras literarias para darle un toque artístico a la narración de sucesos. No funciona. A veces aparecen más como una reflexión cansina antes que natural, de modo que corta la fluidez de la narración. No es que la traducción refleje una forma escritural pésima, y de hecho se puede llegar a disfrutar parcialmente, pero las escenas de relleno provocan que éste aspecto no destaque demasiado.

En resumen, Berserk es un intento de novela de terror, pero que en su desarrollo pierde ese efecto para asemejarse a una mala película de acción. Hay buenas escenas sangrientas y tiene dos protagonistas sostenibles, alguno más que otro, pero la historia no le ayuda. Ah, y notarán que en las etiquetas la coloco como ciencia ficción, pero el porqué es un spoiler. Solo digo que es un cliché ya visto en otras historias previas de terror o sci fi. No creo que les guste.          

Sección spoiler: ¿Qué es un berserk?

Ahora sí llegamos al gran secreto de Natasha, o no tan grande. Gracias a los recuerdos que ella implanta en Tom observamos que no se encontraba sola, sino que pertenecía a una familia de berserkers, criaturas supuestamente provenientes del interior de la tierra. Tal idea se mantiene hasta que los dos alcanzan por fin a los últimos berserkers supervivientes de la antigua masacre, y por ellos nos enteramos de que en realidad fueron humanos. Las fuerzas militares los utilizaron como experimentos para crear armas humanas, pero la situación se les escapó de las manos y algunos lograron escapar. Si antes afirmaba que la naturaleza de estas criaturas no era original era por el ya reutilizado recurso de la experimentación militar con un descuido en el proceso. Desde el cine post-nuclear las fuerzas armadas ya no son vistas de manera heroica, sino villana, y a estas alturas ya no sorprende salvo para alguien nuevo en estas tramas.                   

Detalles técnicos:

Género: Ciencia ficción

Editorial: La Factoría de Ideas

Año original de publicación: 2006

Año de la presente edición: 2013

N° de páginas: 284

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